EL TOMATE

Probablemente es la estrella de la ensalada, cuando tiene su delicioso sabor “de verdad” (con los cultivos y explotaciones comerciales actuales muchas veces ! no sabe a nada ¡). Forma parte de la prehistoria del continente americano, de donde emigró al resto del mundo. Los españoles lo llevaron primeramente a Europa en 1540. Es una planta de la familia de las solanáceas, que se dio muy bien en los climas mediterráneos. Al parecer los tomates que se cultivaron en Italia tenían color amarillo, por lo que un botánico lo llamó “manzana de oro” (pomodoro). En Nápoles, en 1692, publicó ya un libro de cocina con recetas, de origen español, a base de tomate. Y es que, como es sabido, no sólo se emplea en ensaladas, sino para guisar, hacer salsas y adornar. Su valor alimenticio es muy elevado. El tomate es rico en vitaminas A y C, y tiene, además, un gran contenido de minerales. Preserva el organismo de enfermedades infecciosas,es refrescante, diurético y laxante. hay diversa variedades. Pero no hay nada comparable al tomate maduro, arrancado directamente de su mata, bien lavado y con un poquito de sal.

Virtudes García Gómez, Cortijo Grande, Puebla de don Fadrique.